6 de octubre de 2009

Mónica Angelino


A do de pecho



Voy por mi derecha




por mi derecha hacia la izquierda

de todo lo que soy

haciendo buches de sal muera calzando

un zapato en cada pie




de pájaro de lágrimas de verde

con migas de panes en la boca y jazmines

en la frente voy de trueno

sin tabúes sin dios a orgasmo puro



de trigo de vino de maíz

de corcheas en la oreja

con rodajas jugosas de naranjas

chorreando bengalas por los dedos



subiendo mientras bajo

con un pucho apagado

en el bolsillo y otro pucho entre los labios

apagado también



con las manos cerradas abierto el corazón

con toda la lluvia y sus eneros

los candados con sus llaves

que no abren y la piel enrojecida

de ozono agujereado de madera

con sus clavos voy azul de viento

silencios y mortaja



en cueros sin un trapo

por el cuello voy embudo

de botella hasta el fondo

como válvula sigmoidea



resistiendo.




6 comentarios:

  1. Y resiste en tus versos... y ellos resisten en mi mente, porque me encantaron!

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  2. Sí. Definitivo. Hay un Sello que grita sí, aquí está mi poesía cadenciando los bordes, sí a puro decaer sin tocar, subir, tocar el inefable y ponerse de barro para volver Poema. Sí. Está tu poesía, toda ella.

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  3. Olá minha cara!

    com certeza é um dos mais belos poemas teu que já li. Parabéns! Muitíssimos Parabéns!

    um grade abraço a ti e tenha aum lindo final de semana.

    daufen bach.

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  4. Hola Mónica,

    ese resisitir. sí. permanecer en la poesía, siempre.

    un beso muy grande
    Mónica

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  5. ¡Bravo!
    Maravilloso leer algo así.
    ¿Música? Esta es la prueba y la evidencia de que la música está en las palabras y no en la rima y en la métrica.

    Dan ganas de cantarlo, de gritarlo, de hacer un himno con él.

    Besssssossss
    Laura

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  6. Llegué desde el blog de Bibiana; un gustazo descubrir tu poesía, saludos desde Bahía Blanca.

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